La Hidra de Terna, la temida criatura de varias cabezas serpentinas, refleja a las gentes de tierras adentro y tierras afuera, pues enfrentarse a ella es un esfuerzo inútil. A cada cabeza cortada, emergen dos de nuevas. Y en cuanto la Hidra no se enfrenta a ninguna amenaza, se muerde sus otros cuellos, pues violencia es todo lo que conoce.

Diofennous de Crinepo

Génesis de Mía Niké

Buenas tardes y feliz año nuevo, hoy vamos a hablar de la génesis de este proyecto. ¿Qué dio nacimiento a Mía Niké?

Obviamente una pasión por el wargaming arrastrada desde la infancia. Pero la idea de hacer uno propio no surgió hasta un día muy concreto.

Era una mañana, creo que de otoño, en el penúltimo curso de la uni. Y en medio de una clase en la que el profesor se dedicaba a leer en voz alta un powerpoint que todos teníamos ya en el campus virtual, me puse a chatear con un amigo con el que había jugado mucho a fantasy. Él, como yo, amante de la historia. Nos pusimos a charlar de algo que a veces nos trastocaba de Warhammer Fantasy:

¿Por qué un elfo ataviado con una armadura de malla se protege igual de bien que un pijamero con coraza? ¿Por qué se considera que una rata armada con un palo pega con la misma arma que un paladín de los poderes ruinosos con una hacha de hierro meteórico forjada con la sangre de mil demonios? Entendíamos que se debía a la simplificación del sistema, ambas eran armaduras que supuestamente protegen lo normal y, tanto el palo como la mencionada hacha, son armas de una mano. Pero imaginamos que ojalá se fuera más allá porque, por mucho que a día de hoy seguimos amando Warhammer Fantasy, este juego representaba mal como funcionan realmente las armas a dos manos (¡usar una espada con ambas manos la vuelve más ligera!) y además agrupaba todas las armas existentes en un puñado decategorías. Sí, se hacía por mor de la simplificación, aunque luego en Warhammer 40k le dieran perfiles totalmente distintos a cada arma, pero esto es harina de otro costal.

El caso es que, si han existido tantos tipos de armas sólo a lo largo de la edad media, es porque cada una tenía su funcionalidad. Nosotros queríamos respetar eso: quizás una lanza y una pica funcionen de un modo casi idéntico, pero una lanza y una alabarda difieren mucho. Asimismo una espada, un hacha y una maza son tres armas totalmente diferentes, a pesar de que se trataran todas de una mano.

Con esta conversación en mente, pasé a anotar ideas y trabajamos los dos juntos en la génesis de Mía Niké: un wargame que tratara con respeto la tecnología bélica.

Claro que con los días fue evolucionando y adquiriendo nuevas características que la destacan mucho de ese detallismo con las armas y armaduras. Al principio sólo fueron apuntes para modificar Warhammer Fantasy y hacer una versión nuestra. Pero estos apuntes fueron derivando en nuevas ideas en las que quisimos ahondar una vez terminara la universidad.

Tristemente, mi amigo y yo acabamos partiendo caminos por un malentendido. Un malentendido tan tonto como cualquier otro cuya conclusión me sigue doliendo.

Le echo de menos, pero al menos llevo conmigo muchos buenos recuerdos. Sobretodo de conversaciones de historia, partidas de Fantasy, ferias históricas, tiro con arco y de cuando trabajamos juntos en un prototipo para hacer un Warhammer Fantasy más creíble.

Sin embargo, no he permitido que esta ruptura detuviera por completo y para siempre la realización de un anhelo.

Año nuevo, vida nueva.

Un abrazo,

Erland

Deja un comentario

Blog at WordPress.com.

%d